Nuestra historia, la historia de Casa Ferino, comienza en el año 1956 gracias a Ferino, conocido popularmente como “El carboneru de Roces”. Varios años después, el bar pasa a ser de Ovidio, “El Chaflán”. Posteriormente pasaría a manos de Lolo, “El del Puentín” y luego a Alfredo, “El del Rubio”.
Esto fue el germen de lo que poco a poco se ha convertido en uno de los negocios de hostelería más apreciados de Gijón. Ya en el año 1966, Ángel Costales y María Isabel Costales, se hicieron cargo del negocio, haciéndolo crecer y ganar cada vez más reconocimiento entre gijoneses y visitantes.
Fueron años de mucho trabajo hasta su fallecimiento, momento en el que toma el relevo su hijo, Jorge Ángel Costales Costales y su nuera, María Martínez Valdés, quienes junto a su equipo de trabajadores siguen manteniendo a Casa Ferino en lo más alto de la gastronomía asturiana.